La medida que quiere tomar la Generalitat de Catalunya será una tasa impuesta a las operadoras que dan servicio de internet por cada abonado que tenga una conexión a la red. Esta tasa no es muy grande, ya que el monto llega al cuarto de euro mensual, pero puede ser peor de lo que parece.
La cantidad que pretenden cobrar a las operadoras son 0,25€ por cada cliente que tenga conexión a internet, es decir, simplemente unos tres euros al año. Esto supone poco dinero por cliente, pero al final esperan recaudar más de 20 millones de euros al año. Y eso no es todo, sino que se pretende tener en vigor antes de verano y empezar a cobrarse.
El conseller es muy avispado vaticinando que las operadoras más grandes se van a oponer a esta tasa. Y es que no es para menos, ya que o bien supondrá un coste para las mismas, o acabarán subiendo el precio de las conexiones a internet ya de por sí caras si hablamos de la media europea.
En el periódico la Razón aparecen las palabras del conseller: “Podemos silbar o afrontar la realidad. Y lo que nos gustaría es que las nuevas generaciones con ganas de hacer audiovisual y también los mayores lo puedan hacer. Si no espabilamos, en cambio, no podremos continuar haciendo frente a eso. El tributo está hecho para que se hagan buenas películas“.
Desde Noviembre que se viene anunciando la medida a tomar asociaciones como AMETIC han hecho público su desacuerdo ante este cánon, sí, no es otra cosa que un impuesto que tocará pagar a los ciudadanos por algo que «podríamos» hacer. Como guinda según Mascarell esta tasa no será para líneas móviles, sino únicamente para fijas.